Escribir un libro


Tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro.

Esas son las tres cosas que hay que hacer en la vida, dicen. Y ahora entiendo porqué están en la misma frase.

Yo no he tenido un hijo. He tenido tres. Cuando tienes un hijo, sobre todo el primero, piensas que el trabajo se acaba después del parto. Nada más lejos de la realidad. Eso es sólo el principio.

Yo no he plantado un árbol, he plantado varios y muchas plantas. Cuando metes la semilla en la tierra piensas que el trabajo se acaba. Nada más lejos de la realidad. Eso es sólo el principio.

Yo no he escrito un libro, he escrito mucho. Algunas cosas las he publicado y otras no. Y cuando las palabras dejan tu mente, pasan por tus dedos y se convierten en un documento, piensas que el trabajo ya está hecho. Nada más lejos de la realidad. Eso es sólo el principio.

Con los hijos y las plantas, no me ha ido mal. Estoy muy orgullosa de mi trabajo he conseguido verlos crecer y además he aprendido mucho en ese recorrido.

Pero con los libros... no. No consigo que la gente me lea. No soy capaz de llegar a las personas. 

Los hijos necesitan amor, cuidados, atención, alimento, educación, buenos ejemplos, libertad para cometer sus propios errores y sobre todo el saber que pase lo que pase, siempre estarás ahí.

Las plantas necesitan amor, agua, tierra, sol, alimento y un lugar donde se encuentren a gusto.

Y las personas necesitan... ¿qué necesitan las personas? ¿Qué les puedo ofrecer con mis escritos para que no puedan dejar de leerme?

Si tanto los hijos como las plantas necesitan alimento, ¿Cómo puedo alimentar a las personas con mis escritos?

Si lo primero que necesitan los hijos es amor y lo primero que necesitan las plantas, es amor. ¿Será que lo primero que necesitan las personas es... AMOR?

El problema es que, en general, la gente me cae mal. ¿Cómo puedo darles mi amor a las personas si me parece que, la mayoría no se lo merece?

Me temo que, de momento, voy a tener pocos lectores...

 

https://www.gabrielsalvado.com/
Dibujo original de Gabriel Salvadó. https://www.gabrielsalvado.com/

 


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