Ama de Casa a los 40

Con los niños pasa como con las flores. Si no los observas cada día, pasa el tiempo y, sin que te des cuenta ya se han hecho mayores. Esta primavera he estado fotografiando la flores y plantas de mi jardín y he podido ver cómo de la nada, iban apareciendo rosas, lirios, margaritas, clivias... No es la primera vez que lo veo. Seguro que vosotros tampoco. La suerte que tenemos es que cada año vuelve a repetirse el proceso, y si te lo pierdes, tienes otra oportunidad de ver el milagro al año siguiente. Pero.... con los hijos, no es así. No hay más año que tu vida, y si no lo ves, no tienes una segunda oportunidad, excepto, si cabe, ver crecer a tus nietos..... Dedicado a mis hijos: Raúl, David y Sara

Estoy segura que, como yo, tienes miles de fotos digitales guardadas en el ordenador, o en otros dispositivos de almacenamiento (CDs, discos duros externos, pen drives, móvil y también en las tarjetas de memoria de las cámaras). Porque cuando estás viendo a tu niñ@ jugando, riendo, o con ese vestido nuevo que le queda tan chulo, no te cortas en hacerle fotos y más fotos. O si estás de viaje, no quieres dejar pasar ese monumento o ese espectacular paisaje. Total, son gratis. Y si no me gusta alguna ya la borraré. No me digas que no lo has pensado.... Pero, ¿has borrado alguna, alguna vez? El problema viene cuando después de un par de años, sientes la necesidad de volver a ver aquellas fotos tan divertidas que hiciste en su quinto aniversario, y poder compararlas, con las del cumpleaños que celebrastéis ayer, para ver cuánto ha crecido. Entonces es cuando piensas: ¿Dónde ... piiii.... estarán? Para que esto no te pase, te voy a explicar un método de organización de tus fotos para

¿Alguna vez has comprobado que el precio de la cuenta del supermercado coincida con el de la estantería? Hoy lo he hecho yo. Hace tiempo se ya se me había pasado por la cabeza que con tanto precio, era imposible que no hubiese algún error. Y lo he querido comprobar. Me tocaba hacer la compra semanal y no se me ha ocurrido otra cosa que fotografiar con el móvil los precios de las estanterías.  Cuando he llegado a casa, tranquilamente, he comprobado si los precios que tenía en las fotos, coincidían con los de la cuenta. Y, bueno, la verdad es que sí. En general, sí. Pero, como últimamente, tengo más tiempo, y siempre me ha gustado encontrarle los tres pies al gato, se los he encontrado: Y seguro que es un despiste o un mal llamado "error informático". Son solo 4 céntimos por unidad. Pero la cuestión no es esa. No importa si son 4 céntimos o 4 millones. La cuestión es ¿por qué el error siempre nos toca pagarlo a los mismos?