Ama de Casa a los 40

Cuando digo que la crisis ha terminado, creo realmente que es así. La situación en que nos encontramos ahora, ya no es de crisis. Es el principio de una nueva situación. Al igual que, cuando una guerra acaba, quedan edificios destruidos, víctimas inocentes, familias rotas... Esta crisis nos ha dejado paro, desahucios, suicidios... Esto ha sido una coctelera, un bombo. Y ya ha dejado de ser sacudida, ya ha dejado de girar. Esta sociedad está como el enfermo que acaba de salir del hospital, después de una larga estancia, y varias operaciones. Listo para volver a casa, pero aún débil. Lo que tenemos que asumir es que NUNCA, NUNCA, NUNCA, vamos a volver a la situación en la que estábamos. La burbuja explotó y ya no queda jabón. Esto es un nuevo punto de partida. Y tenemos que comenzar con lo que tenemos hoy. Lo que hemos aprendido, nuestra experiencia, son ahora herramientas que debemos usar para conseguir algo nuevo. Si tienes la suerte de haber conservado tu empleo, puedes

Esa noche había llovido, y lo que antes era un camino duro y firme, se había convertido en un río de barro por donde las ruedas de los carros hacían surcos al pasar. Las piedras de los lados del camino, arrastradas por el agua se hundían en el fango, mezclándose con él y abriéndole agujeros donde quedarían para siempre. Cuando dejó de llover, el fango, cansado de recibir a tantos huéspedes en su interior, se sentía exhausto y triste. Solamente deseaba que las nubes se marcharan y dejaran que el sol pudiera visitarle. Al día siguiente, el sol apareció. Y empezó a calentar. Y al mediodía apenas quedaba agua en su superficie. El fango, empezó a sentirse fuerte y las piedras que descansaban en su interior, ahora lejos de ser una molestia se habían convertido en parte de su estructura, haciéndolo más firme y duro. A los tres días, el camino de barro era un camino liso. Mientras el sol le acompañaba, nada podía hacerle daño. Las piedras reposaban encima del fango, sin incrustarse, sin mo

Por si no lo sabéis, Minecraft es un videojuego. No lo venden en las tiendas. Se descarga de Internet. Y no sé que tiene pero a mis hijos los tiene enganchadísimos. Sobre todo al mayor, de 10 años. Cuando quiero que se porten bien, no hay mejor amenaza que dejarles sin jugar el fin de semana a Minecraft. Y es que se lo he tenido que dosificar. Sólo juegan el sábado por la tarde. Hace unas semanas, mi hijo mayor, me pidió comprarse la licencia que cuesta unos 20 euros. Y yo, para darle largas, le dije que si en el examen que iba a hacer esa semana sacaba un 10, dejaría que se lo comprara con el dinero de su hucha. Si no, tendría que esperar a final de curso, y si lo aprobaba todo, también le daría permiso. Y me quedé tan ancha, sabiendo que había ganado la partida. Y que ya no me molestaría más con el tema. A la semana siguiente, cuando me vino con el resultado de su exámen..... Pues que sacó el 10. No me lo podía creer. Y compramos la licencia. ¿Qué iba a hacer? Un trato es un

Cuando el tiempo se te viene encima, y tienes que ponerles algo de comer a tus niños, una buena solución es prepararles espagueti con salchichas de leche. Se lo comen muy bien, y en menos de 15 minutos lo tienes hecho. Pon en una olla agua a calentar con un puñadito de sal. Cuando rompa a hervir pon los espaguetis a cocer. Mientras tanto, en una sartén pon una cucharadita de aceite y cuando este caliente pones las salchichas. 4 para cada niño. Y cuando estén doradas, las sacas. En un plato sirve los espagueti cocidos, encima , las salchichas hechas trocitos y un poco de tomate frito. Y ya está.

Justo un día después de cumplir los 40 la vi. Ahí estaba escondidita entre mi pelo. Blanca como la nieve y recta como un tronco. Se había plantado allí, en medio del bosque negro de mi cabeza, sin permiso.  ¡Vaya okupa! Lo malo es que Cana es como la mala hierba, al principio solo hay un tallo, y claro, no pasa nada. Pero a los pocos días, aparecen dos o tres más un poco más allá y luego cuatro o cinco más, al lado de las otras, y sin darte cuenta, al final, han poblado todo el patio de tu casa  y tienes que arrancarlas... ¿Arrancarlas? Eso pensé en primer lugar. Pero de qué sirve, si van a seguir saliendo. Será mejor que me haga amiga de ellas, total, ya me van a acompañar el resto de mi vida. Les he comprado un vestido negro a cada una y así nos empezaremos a llevar bien. Pero lo peor es que Cana no vino sola, se trajo a su amiga Arruga que se había colocado justo entre mi ojo y mi sien. Ésta es más tímida. Sólo me saluda cuando le sonrío. Pero cada vez se queda más

Erase una vez un manzano solitario que vivía en lo alto de una colina. Era verano y estaba cargado de montones de manzanas. Algunas aún verdes, otras a punto de madurar y otras, listas para ser recolectadas. Estas últimas se reían de las otras, pues sabían que pronto serían recogidas por el hombre para llevarlas a un mundo mejor. Lo que ignoraban era, que su único destino iba a ser formar parte de algún banquete o convertirse en zumo para beber. La pequeña manzana inmadura, deseaba que pasara el tiempo para convertirse en una jugosa manzana roja, y poder seguir el camino de sus hermanas mayores. Pero aquella noche, hubo tormenta, y una fuerte ráfaga de viento la descolgó de su rama. Cayó al suelo, y el golpe arañó su piel. Rodó colina abajo, y llegó a un riachuelo formado por la lluvia que la arrastró. Cuando llegó la mañana, el agua dejó de caer y un sol radiante lucía en el cielo. Estaba llena de golpes, y buena parte de su carne quedó al descubierto. David, 8 años. M